lunes, 14 de febrero de 2011

Despertares

Cuando al final del día, me meto en la cama y me estiro y noto su tacto suave, limpio y fresquito bajo mis pies, de repente me doy más cuenta todavía de lo supercansada que estoy y pienso: este es el mejor momento del día!!!
Pero al cabo de unas horitas, no demasiadas, vuelve a amanecer y oigo una vocecita que me llama en la habitación de al lado. Sin apenas desperezarme voy corriendo y me meto con ella en su camita y me lleno de su calorcito, de sus abracitos, de su olor y de un ratito de confidencias: es lo que oficialmente se llama en esta casa "hacer perecita". Y es maravilloso, el mundo se detiene un instante en esa cama, allí con ella. Dentro de un momento empezarán las prisas y el ajetreo, pero estos minutos son sólo nuestros, de las dos. Al cabo de un ratito aparece papi por allí, con su alegría y con sus bromas y ya nos levantamos. De repente se oyen unos ruiditos, alguien está hablando con su particular lenguaje. Nos vamos corriendo a la cunita y allí está la otra que nos recibe con una sonrisa que te ilumina el alma, contenta de vernos, empieza a chillar y a dar patitas al aire. La cojo entre mis brazos, la aprieto, la huelo y la lleno de besos.... y pienso que no se puede ser más feliz... no se puede.... y que este si que es el mejor momento del día.

1 comentario:

  1. Qué guay!!! yo tb tengo ese momento del día!!, cuando del otro lado de la habitación una vocecilla me llama " mamii", o cuando me asomo calladita la la cuna de mi bebé y, por sorpresa abre los ojitos y me llena el alma con su sonrisa.
    Sé lo que sientes y es lo mejor que nos pudo haber pasado, sin duda.
    Intentaré meterme en la cama con Sarita para notar su calorcito (porque es ella la que viene a nuestra cama para meterse entre los dos)

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